El uso de alineadores transparentes y de la planificación digital de nuestros tratamientos hace que en muchos casos “veamos” cosas que difícilmente podíamos apreciar con ortodoncia fija.
Uno de ellos son los movimientos de “vaivén”, también conocidos por su expresión en inglés “round tripping”, que con Brackets y alambres eran inevitables en muchos casos, en los que los dientes se alineaban mediante expansión de la arcada (ya fuera transversal o proinclinación), para después moverse a su posición final quizás tras realizar stripping u otras formas de generación de espacio en arcada.
“Hay que evitar el vaivén”. Sí, es cierto. Hay que evitarlo siempre que tenga solo efectos negativos.
Pero, en muchos casos, necesitaremos realizarlo, como por ejemplo en la técnica PIR descrita en este mismo blog, dado que procura el espacio necesario para aplanar la curva de Spee.
También necesitaremos hacer vaivén cuando busquemos puntos de contacto adecuados antes de hacer stripping… en cualquier caso, lo importante es tener claro que los objetivos del tratamiento pueden justificar tener que hacerlo, y que evitar este no puede ser la “clave” de un tratamiento, que puede bloquearse por no pararnos a reflexionar que esto debe evitarse solo cuando no aporte al resultado final del tratamiento.